Uda honetan ... El Verano

Jarraian garrantsitsua iruditu zaigun artikuloa plazaratzen dugu luzea izan arren . Publicamos un árticulo que por las fechas que estamos nos parece interesante. Esperamos que os guste. ¿Qué hacemos en verano? Anna Forés Miravalles
UNA PREGUNTA QUE PARECE SENCILLA DE CONTESTAR, PERO QUE ESCONDE LA COMPLEJIDAD DE LA RESPUESTA PORQUE IMPLICA DECIDIR ATENDIENDO A DIFERENTES CRITERIOS PERSONALES, PROFESIONALES, DE TIEMPO LIBRE DE LOS HIJOS Y DE TIEMPO LIBRE FAMILIAR. Vivimos un momento en el que nos es cada vez más difícil decidir. ¿Por qué? Simplemente, porque cuantas más posibilidades tenemos, más desorientación también se nos crea para decidir qué hacemos y, muy especialmente, para decidir qué hacemos en verano. En verano, la dimensión del tiempo pierde las coordenadas de cotidianidad que marcan la escuela y el trabajo, por lo que su transcurso parece diferente. La diferencia substancial entre el tiempo de vacaciones de padres-madres e hijos-as parece muchas veces insalvable. Y es necesario establecer sistemas de diálogo y de gestión del tiempo de vacaciones. Así, pues, hace falta tratar de establecer una buena gestión del tiempo y a la vez ser coherentes entre los proyectos de los hijos-as, los proyectos como pareja o como adultos, los proyectos como familia y el presupuesto y la disponibilidad de vacaciones de todo el conjunto de los miembros de la familia. Al fin y al cabo, se convierte en un juego de malabaristas para combinar todas las demandas y ajustarlas a la realidad. ¿Que hará cada persona en verano? ¿Qué haremos juntos? ¿Cómo podemos decidir? Fácilmente, la ocupación del tiempo del verano se puede convertir en un elemento estresante y no de descanso, si no hemos contado con la opinión de toda la familia antes de la distribución de los días y las semanas, y de las actividades a realizar. Hay una frase inacabada que nos puede ayudar a decidir de una manera óptima... Haría falta plantearse lo siguiente: cuando acabe el verano me gustaría que...Me gustaría que... Habría que terminar la frase con todas las aportaciones de los miembros de la familia. Cuando acabe el verano me gustaría... haber jugado, haber bailado, haber estado con los amigos, viajado, hacer deporte, leer, descansar, relajarse, disfrutar todos juntos o aprovechar el tiempo para hacer todo aquello que no hemos hecho durante el año. Saber qué queremos puede ser el primer paso para priorizar, porque seguramente tendremos que escoger, y escoger también es dejar atrás opciones.No fuera caso que cuando acabara el verano resultara que nadie esté contento porque realmente escogimos sin saber qué querían los demás o dando prioridad a otros temas: comodidad, proximidad, rutina, etc. Debemos darnos cuenta de que cuantas más posibilidades tengamos para elegir y más desorientados estemos constituye el primer paso para establecer preferencias y saber escoger; atender a las diferentes expectativas es el otro paso, puesto que como este verano no habrá otro.